Las medidas adoptadas por los gobiernos influyen en el corto plazo en los componentes de la demanda agregada. Esta influencia puede derivarse de la política fiscal, monetaria y comercial.

En la política fiscal:

• Si disminuyen los impuestos:
  – Las familias tienen más renta disponible y consumen más si se mantiene la misma propensión marginal al consumo. Si aumenta la propensión marginal al ahorro hay más dinero en el sistema financiero para financiar la inversión.
  – Las empresas tienen más beneficios, por lo que pueden repartirlos entre sus accionistas, que podrán consumir más o invertir en su proceso productivo.
• Si aumentan las ayudas:
  – Las familias tienen más rentas disponibles, con el mismo razonamiento expuesto anteriormente.
  – Las empresas tienen más ingresos, hecho que tiene las mismas consecuencias detalladas en el punto anterior.
• Si se reduce el déficit:
  – Al haber menos demanda de fondos por parte del Estado, bajan los tipos de interés y hay más dinero disponible para el sector privado, tanto para el consumo como para la inversión.

En la política monetaria:

• Si bajan los tipos de interés:
  – Las familias pueden endeudarse más, ya que les cuesta poco y de ese modo pueden consumir más. Además, se reduce su propensión marginal al ahorro, porque no reciben una elevada remuneración por el mismo.
  – Las empresas se endeudan más para poder invertir en sus procesos productivos, ya que el coste es inferior y pueden obtener las rentabilidades necesarias.
• Si aumenta la oferta monetaria:
  – Al haber más dinero en circulación, bajan los topos de interés y como consecuencia los efectos son los mismos que los descritos en el punto anterior.

En la política comercial:

• Si hay subvenciones a la exportación:
  -Las empresas pueden vender en el exterior sus productos a un precio más competitivo, por lo que aumentan sus exportaciones.
• Si existen aranceles de entrada:
  – Las empresas extranjeras deben pagar los aranceles, lo que implica un encarecimiento del precio de sus productos, que ya no serán tan atractivos como los mismos productos nacionales. Esto implica una reducción de las importaciones.
• Tipo de cambio:
  – Si devalúan la moneda, los productos nacionales son más competitivos en el exterior.

Información extraída del webinar impartido por Pilar Carrato para EALDE Business School.