La Dirección de Personas se enmarca dentro de la estrategia empresarial. La gestión de las personas debe motivar y hacer partícipe al empleado de los éxitos de la compañía. Está liderada por el director de personas o director de recursos humanos.

La gestión de los recursos humanos ha de ser coherente con la estrategia planteada por la organización y contemplar a las personas como una fuente de ventaja competitiva. Se ha de reconocer el trabajo de las personas. Resultan necesarios la participación, el respeto y la escucha del empleado.

Contratación de personal

La contratación implica un período de maduración e ir más allá. No solamente se ha de contemplar un enfoque persona-puesto, sino también un enfoque persona-organización. Los empleados han de compartir la misión, visión y valores de la compañía, para poder sentirse identificados con ella. En este contexto, los procesos de contratación se hacen más complejos e influyen en ellos herramientas como LinkedIn.

Las empresas han de cuidar su employer branding o marca como empresa empleadora. Han de ser atractivas a la vista de aquellos que pretenden mejorar en su desarrollo profesional o que se encuentran en la búsqueda activa de empleo. Se trata de poder optar a captar al mejor talento.

Rendimiento de empleados

El departamento encargado de esa gestión de personas ha de ser capaz de medir cuál es su rendimiento. Esa evaluación permitirá la toma de decisiones y mejora continua. Para esa correcta evaluación del rendimiento, hay que desarrollar una comunicación coherente con los valores y políticas de la empresa.

Motivación y compromiso

La gestión de personas implica el mantenimiento de la motivación y el compromiso de los empleados. Hay elementos motivantes y desmotivantes, como el salario, las instalaciones de trabajo, la flexibilidad horaria, etc.

Para esa motivación y compromiso del empleado, hay que cubrir necesidades básicas, seguidas de la aceptación social, autoestima y autorrealización, según Maslow. El aspecto cultural también incide en esa motivación de una u otra forma, atendiendo a las peculiaridades de cada lugar. El compromiso afecta al rendimiento y al tiempo de permanencia en la empresa.

Información extraída del webinar impartido por Natxo F. Laguna para EALDE Business School.